Jean-Michel Frank
Assouline presenta el retrato de un artista icónico y a la vez misterioso, cuya obra iluminó las artes decorativas del siglo XX. Jean-Michel Frank nunca estudió arquitectura ni diseño, pero durante las décadas de 1920 y 1930, este diseñador de interiores autodidacta perfeccionó su estilo único, que se convirtió en un referente de la sofisticación del Art Déco. Oro, seda, mármol y chapas de madera fina se emplearon junto con marquetería de paja, pergamino, yeso, cuero, lienzo y roble envejecido.
Colaborando con los mejores artistas de la época, como Alberto Giacometti y Christian Bérard, Frank diseñó y dirigió artísticamente interiores depurados pero suntuosos para mecenas notables, desde Marie-Laure y Charles de Noailles, Nelson Rockefeller y Elsa Schiaparelli hasta instituciones francesas como la Comédie Française y el Hôtel Crillon.
Al igual que el atemporal vestidito negro, muchos de los diseños de interiores de Jean-Michel Frank aún tienen el poder de transformar un espacio con una elegancia sobria y siguen inspirando el estilo contemporáneo. Este volumen definitivo cuenta la historia y muestra las creaciones de uno de los diseñadores más influyentes del siglo XX.